El queso Jarlsberg es un típico queso noruego. Sin embargo, con frecuencia se lo comercializa como un queso suizo debido a que presenta características similares a éstos.
Es especialmente semejante al queso Emmental, pero es ligeramente más dulce y fuerte que éste.
Aunque no se trata de un queso frecuentemente consumido en Argentina, vale la pena incorporarlo en nuevas recetas y picadas para añadir un sabor y textura nuevos.
Historia del queso Jarlsberg
Fue creado en el siglo XIX por un emprendedor, Anders Larsen Bakke. El nombre “Jarlsberg” procede del nombre del condado donde era producido originalmente, que a partir de 1918 cambió su nombre a Vestfold.
Por un tiempo se dejó de producir hasta que se produjo su “renacimiento”: A mediados del siglo XX se vuelve a dar protagonismo al queso Jarlsberg. Su re-descubridor fue el agrónomo Ola Martin Ystgaard, quien se dedicó a descifrar la receta original en la Universidad de Agricultura de Noruega. Fue a partir de 1960 que se retomó la elaboración con la receta que aún hoy se utiliza.
En la actualidad su receta secreta es razón de orgullo para Noruega, ya que el queso Jarlsberg representa uno de los alimentos más demandados para exportación. El país que lo importa en mayor cantidad es Estados Unidos.
Descripción del queso Jarlsberg
Posee una corteza natural encerada amarilla y un interior amarillo-dorado. De hecho, una de su características distintivas es la uniformidad de su color. Su textura es semiblanda y tiene un sabor parecido a la nuez. Se encuentran de forma irregular orificios dispersos en toda su pasta. Esta característica es realmente distintiva, ya que el tamaño y la forma en la que se distribuyen los “ojos del queso” es notablemente irregular.
Se comercializa en variados formatos: ruedas, rebanadas o piezas cortadas al gusto del consumidor, principalmente.
Se parte de leche pasteurizada de excelente calidad, de los prados de verano. Su tiempo d maduración es de entre 4 y 12 meses. Luego de este tiempo alcanza un sabor y una textura agradables, ideales para combinar con variedad de alimentos.
¿Como disfrutar el queso Jarlsberg?
El queso Jarlsberg es reconocido en todo el mundo por ser muy versátil; es incorporado en platos de muy diversas culturas.
El queso Jarlsberg puede adaptarse a diferentes fines: para elaborar platos principales, entradas o aperitivos. Debido a la facilidad con la que se funde el queso Jarlsberg es ideal para incorporar a fondues, platos calientes o gratinados.
Muchas veces se lo incorpora a picadas, siendo el uso que más tienden a darle los argentinos. Por la suavidad de su sabor, aroma y textura es ideal para acompañar fiambres, vinos y cervezas de sabores intensos.
En tablas de quesos también es ideal incorporarlo, ya que logra un contraste perfecto con los quesos más intensos y de consistencias más duras.
Es un queso que fácilmente pueden disfrutar los niños, en sándwiches u otras preparaciones más complejas. Cuando haya comensales menores de edad se puede confiar en que disfrutarán la presencia del queso Jarlsberg en el plato.
La Tabla del Queso Jarlsberg
- Hecho de leche de vaca pasteurizada
- País de origen: Noruega
- Región: Jarlsberg
- Familia: Queso suizo
- Tipo: semi-blando
- Textura: abierta , lisa y flexible
- Cáscara: encerada
- Color: amarillo pálido
- Sabor: mantecoso, suave, de nuez
- Aroma: nuez
- Vegetariano: no
- Productores: Norseland Ltd.
Información nutricional
Tamaño de la Porción: 1 rebanada (21 g) por porción:
- Kilojulios 211 kj
- Calorías 50 kcal
- Proteína 7 g
- Carbohidrato 0 g
- Azúcar 0 g
- Grasa 2,5 g
- Grasa Saturada 1,5 g
- Grasa Trans 0g
- Grasa Poliinsaturada 0 g
- Grasa Monoinsaturada 0 g
- Colesterol 10 mg
Excelente con todo,me encanta comerlo con el café caliente,su textu,color y olor muy agradales
Exquisito queso!!!!
Felicidades por tan excelente labor!!!!
Gracias ????
Éxito siempre ❤️????????